Desarrolla UAT bioinsecticida para combatir plagas que afectan la apicultura
La Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) está llevando a cabo un innovador proyecto que busca combatir la enfermedad conocida como “varroasis”, causada por el ácaro *Varroa destructor*, utilizando un insecticida elaborado a base de plantas. Esta enfermedad representa un grave problema para la apicultura en México y en el mundo.
El Mtro. Jesús Humberto Reyna Flores, estudiante del Doctorado en Ciencias en Sanidad y Producción Animal de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ-UAT), explicó que la investigación se centra en encontrar un método natural para combatir este ácaro, que afecta a las abejas obreras, reinas y zánganos. La varroasis es un reto significativo para la apicultura debido a la resistencia que el ácaro ha desarrollado por el uso excesivo de productos químicos.
Reyna Flores señaló que el incremento de dosis de diversos compuestos químicos impacta negativamente en la inocuidad de la miel y otros productos derivados como la cera, debido a la presencia de residuos químicos. Por ello, su proyecto se enfoca en utilizar diversas especies botánicas, como aceites esenciales, extractos, hojas o frutos secos y moliendas, que han demostrado ser efectivos en términos de mortalidad y caída de ácaros.
El proyecto experimenta con plantas como el huizache (*Acacia farnesiana*), el chaparro prieto (*Acacia rigidula*) y el laurel silvestre (*Litsea glaucescens*). Los estudios revelaron que el huizache mostró una mayor capacidad antioxidante y posibles efectos insecticidas, mientras que el laurel es una de las especies aromáticas con mayor cantidad de compuestos útiles para combatir la enfermedad. Por otro lado, el chaparro prieto, al igual que el huizache, pertenece a la familia de las fabáceas y tiene efectos antimicrobianos.
La importancia de este estudio radica en encontrar una alternativa al uso de insecticidas químicos, que pueden dañar la locomoción de las abejas. Según Reyna Flores, con base en los resultados obtenidos, se evaluará la mortalidad de los ácaros y de las abejas para determinar si los compuestos detectados pueden ayudar a desarrollar un tratamiento alternativo. Este tratamiento debería ser replicable, de fácil acceso para los productores y, sobre todo, seguro para la salud de las abejas.
Con este proyecto, la UAT reafirma su compromiso con la innovación y la sostenibilidad en la apicultura, buscando soluciones que protejan tanto a las abejas como a los productos derivados de su actividad.
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